domingo, 15 de mayo de 2011

7 - LA ENDOGAMIA EN LA CORTE ESPAÑLA : FELIPE V

 

Primer Rey Borbón de España 

 

Carlos II, último rey de “los Austrias”, murió el 1 de noviembre de 1700, pero antes de morir había nombrado a su sobrino-nieto Felipe de Borbón, “duque de Anjour”, como su heredero de la corona de España

Con la esperanza de evitar así la división de “su gran imperio español” y convencido de que Luis XIV, rey de Francia estaría de acuerdo con esta decisión, ya que se trataba de proclamar rey de España a su propio nieto, restableciendo así de nuevo la línea sucesoria, a la que habría renunciado su esposa Mª Teresa de Austria, al casarse con él, y convertirse en la reina consorte de Francia

De “sangre real” tanto española como francesa

Hijo de Luis “Gran Delfín” y Ana de Baviera

 



Luis “Gran Delfin”, hijo del rey Luis XIV y de María Teresa de Austria, que eran sus abuelos

María Teresa de Austria era hija del rey Felipe IV de España e Isabel de Borbón, que serían sus bisabuelos "maternos "y que además , los dos , eran tíos de Luis XIV, por lo que Luis XIV y su esposa Mª Teresa, eran primos hermanos dobles.

Pero además Felipe IV era el suegro de Luis XIV, al estar casado con su hija

Los bisabuelos "paternos" de Felipe V eran Luis XIII y Ana Mauricia de Austria (padres de Luis XIV)

Ana Mª Mauricia de Austria era nieta del rey Felipe II de España, e hija de Felipe III y Margarita de Austria y por lo tanto, hermana de Felipe IV, casado en primeras nupcias con Isabel de Borbón, hija de Enrique IV de Francia y María de Medici

Y en segundas nupcias con Mariana de Austria, padres de Margarita, casada con el emperador Leopoldo I, y hermana del rey Carlos II de España, que era su tio abuelo, casado en primeras nupcias con Mª Luisa de Orleans, hija de Felipe I “duque de Orleans” y Enriqueta de Inglaterra

Felipe I , duque de Orleans era hijo de Luis XIII y de Ana Mª Mauricia de Austria y hermano pequeño del Luis XIV, el rey SOL, que era su abuelo


                                           Felipe V y su abuelo el rey Luis XIV


El 16 de noviembre de 1700, es decir, quince días después de morir el rey Carlos II, Luis XIV de Francia anunció en el tribunal español, que aceptaba la voluntad de su primo hermano y sobrino, Carlos IIreconocía a su nieto Felipe como rey de España , quien aceptó la Corona ese mismo día, a la edad de 17 años


                                               Coronación de Felipe V


Felipe V fue un adolescente tímido, abúlico e inseguro, caía continuamente en breves periodos de depresión, al igual que su madre, la cual pasó la mayor parte de su estancia en el Palacio de Versalles encerrada en sus aposentos a causa de una persistente depresión.



Solo la guerra animaba su apatía congénita, lo que le valió el sobrenombre de “animoso”, que, junto con su adicción incontrolada al sexo, y sus temores religiosos, fue posiblemente lo único que consiguió mantener ocupada la mente de este primer Borbón, Rey de España.



Reinó con el nombre de FELIPE V, y su reinado fue largo, unos 45 años, pero estuvo marcado por el deterioro de su salud mental

 

Pactaron su boda con María-Luisa Gabriela de Saboya y Orleans

 

Hija del biznieto de Enrique IV: Víctor Amadeo II, (duque de Saboya y rey de Cerdeña) y Ana María de Orleans, sobrina del propio Luis XIV

 

   

 

Por tanto, era cuñada por partida doble de Luis, duque de Borgoña y Delfín de Francia, ya que este además de hermano de su marido Felipe V, era el marido de su hermana mayor, María Adelaida de Saboya

 

Cuando se casaron María Luisa Gabriela tenía 13 años, y supo satisfacer hasta su prematura muerte las exigencias de su marido, el rey, un hombre muy “fogoso” en el lecho real.


 


Dicen que sus retratos no le hacían justicia, ya que ganaba mucho al natural. Porque, pese a ser de talla pequeña, era de una elegancia innata, y aunque su aspecto era infantil, era muy inteligente y así lo demostró durante su gobierno.


Tanto Mª Luisa Gabriela de Saboya y Orleans como Felipe V, tuvieron que aprender castellano al llegar a España, no solo para poder comunicarse son sus súbditos, sino también entre ellos, ya que ni Felipe hablaba italiano, ni Mª Luisa hablaba francés, lo cual dificultaba aún más su relación, porque como era habitual, no se conocían antes de la boda.



La pareja real al principio no fue bien acogida en España, ya que ninguno de los dos pertenecía a la casa de los Austrias, que eran los que habían reinado en España desde siempre, sino a la nueva dinastía de los Borbones, procedentes de Francia.

Debido a este inicial rechazo fueron apodados como “el Anjou y la Saboyana”



Tuvieron dos hijos varones, y los dos fueron después de su padre, los futuros reyes de España: Luis I y Fernando VI


        


La infancia de estos dos infantes estuvo marcada por el hecho de que su madre, la reina María Luisa Gabriela de Saboya, falleció a los cinco meses del nacimiento de su segundo hijo Fernando, en 1714, con 25 años, a causa de una tuberculosis

A partir de entonces, el rey Felipe V, inició un lento viaje hacia la locura extrema

Empezó a protagonizar ataques de histeria en público y a sufrir terribles pesadillas.

 A pesar de lo cual a los siete meses después de la muerte de su primera esposa, y de haber tenido dos hijos varones que podían sucederle en el trono, Felipe V contrajo de nuevo matrimonio con una princesa italiana:

 Isabel de Farnesio y de Parma



Isabel de Farnesio nació en la ciudad italiana de Parma, era la segunda hija del príncipe heredero de Parma, Eduardo II Farnesio (que murió cuando ella tenía un año) y de la condesa palatina Dorotea Sofia de Neoburgo 

Las muertes sucesivas de su hermano mayor y de su padre y más tarde de dos de sus tíos que murieron sin descendencia, la convertía en la única y legítima heredera de los estados tanto de los Farnesio como de los Médicis 

Mujer de gran belleza, pese a las marcas que tenía en su cara, fruto de unas viruelas infantiles, poseía un cuerpo esbelto y atractivo, al tiempo que era acreedora de un fuerte carácter y una personalidad autoritaria que le otorgó una gran influencia en la corte de la época.

Fue apodada despectivamente” la parmesana”



Con ella tuvo 7 hijos (solo uno murió al nacer)

 La nueva reina, Isabel de Farnesio, era muy consciente de que los 2 hijos del primer matrimonio de su esposo, el rey Felipe V, serian lógicamente los herederos de la corona de España, por lo que se preocupó mucho por la suerte y el futuro de sus hijos e hijas, siendo ella la encargada de elegir esposa o marido a todos ellos, con el único fin de unirles a buenas casas reales:

 -Carlos, que sería rey de España después de sus hermanastros Luis I y Fernando VI

-Mariana Victoria, reina de Portugal, esposa de José I

-Felipe, duque de Parma

-María Teresa, esposa de Luis Delfín, hijo del rey Luis XV

-Luis Antonio, arzobispo de Toledo, hasta que abandonó la vida eclesiástica

-María Antonia, esposa de Víctor Amadeo III

 

Sin embargo, la relación con sus hijastros (Luis y Fernando) y el rígido protocolo de la corte que impedía el contacto directo de los príncipes con los reyes, hizo que no fuera nada buena, hasta el punto que los infantes Luis y Fernando se comunicaban con su padre (y con su madrastra) a través de cartas escritas en francés, que era la lengua que utilizaba la familia. No comían juntos, ni asistían a actos oficiales con sus padres

Se sabe que, al cumplir los siete años, el infante Fernando fue dotado de “cuarto aparte” para que en él le sirvieran solo hombres, dedicados al cuidado de su persona, su asistencia y educación, por lo que estuvieron siempre al cuidado de sus educadores y sin el cariño de su padre



Alejados prácticamente los infantes de su padre, Isabel de Farnesio tenía el campo libre, y supo hacerse con la voluntad de su marido, empleando todas sus armas para que hacerse imprescindible.

Ella con un fuerte carácter supo además crear en el rey una gran dependencia “sexual y afectiva”, convirtiéndose en un matrimonio inseparable 

Pero el rey Felipe V, empezó a dar muestras cada vez más acusadas de su que su salud mental se estaba deteriorando: 

 No tardó en mostrar un grave problema de higiene personal, dormía durante el día, y recibía a ministros y embajadores después de la medianoche en sesiones que duraban horas por lo que mandaba encender todas las luces por la noche y oscurecer las habitaciones de día.


 

La mala salud mental del rey Felipe V, le llevó a firmar el 10 de enero de 1724 un decreto por el que abdicaba en su hijo Luis I de España, de 17 años  



Al que habían casado dos años antes con Luisa Isabel de Orleans y Borbón, dos años menor que él. Nacida el 9 de diciembre de 1709 en el Palacio de Versalles



Hija de Felipe II, Duque de Orleans y de Francisca María de Borbón, (hija ilegítima de Luis XIV y su amante Madame de Montespan) 



El matrimonio de sus padres; Felipe y Francisca, fue impuesto por su abuelo, el Rey Sol. No se llevaron nunca bien, hasta el punto de que Felipe se refería en público a su esposa como “Madame Lucifer”. 

Pese a todo llegaron a formar una familia numerosa compuesta por ocho hijas y un hijo, sin embargo, no mostraron especial interés en criar a sus hijos, por lo que todos ellos sufrían un evidente déficit de cariño, que en la mayoría de los casos desembocaría en la edad adulta en comportamientos extremos y disolutos.

 

Luisa Isabelapenas recibió educación, siendo el único interés de sus padres el que casara lo más pronto posible y de la forma más provechosa para los intereses económicos y estratégicos de la familia. 

La oportunidad llegaría cuando se enteran de que el Rey de España, Felipe V y especialmente la segunda esposa de éste, Isabel de Farnesio, se encontraban en busca de candidatas para llevar al altar a sus hijos.

Finalmente, y tras arduas negociaciones, el acuerdo entre las dos familias se traduciría en dos compromisos matrimoniales, aunque solo se llevó a cabo uno de ellos , el de Luis I con Luisa Isabel de Orleans; el otro compromiso no se llevó a cabo ya que la infanta Mariana Victoria a la que querían casar con Luis XV solo tenía 7 años



La boda del primogénito de Felipe V , Luis I, y su primera esposa, Luisa Isabel de Orleans, se celebró el 20 de enero de 1722 en la localidad burgalesa de Lerma.

Muestra de lo poco ordinario del enlace, es que no podría ser consumado hasta varios años más tarde, habida cuenta la tierna edad de los recién casados, que ni siquiera alcanzaba los quince años en el caso del príncipe Luis y trece en el de la de Orleans.

 Luisa Isabel, es recibida con desafecto por parte de su suegra, Isabel de Farnesio y quizás fuera esta la razón por la cual empezó a dar muestras de padecer algún problema mental:  

 Vestía de forma estrafalaria, corría por los pasillos en camisón de transparencias, se negaba a comer, para acto seguido, engullir en sus aposentos gigantescas cantidades de alimentos que luego, arrepentida, vomitaba entre lágrimas. (en la actualidad sería calificado como un evidente caso de bulimia nervosa)

Sus actuaciones en público, comienzan a rayar en lo bochornoso, cuando en medio de los banquetes la princesa emitía sonoros eructos y flatulencias que provocan la estupefacción de los comensales.

Por las noches, la princesa, casi sin ropa, salía del palacio y se dedicaba a trepar los árboles de los jardines. 

En otras ocasiones, se obsesiona con la limpieza, y utiliza sus costosísimos vestidos para limpiar suelos y paredes

En Madrid se comienza a oír relatos de todo tipo a cerca de la conducta desequilibrada de la princesa. No es de extrañar que popularmente fuera conocida como “la reina loca”

 

Pero para añadir más gravedad al asunto, el rey Felipe V decide abdicar en su joven hijo Luis I, a comienzos de 1724, cuando contaba con 17 años y su esposa con 15

 

Convirtiéndose en Rey de España y con él su esposa, "la perturbada Luisa".



El reinado de Luis I, es el más efímero de la historia de España, de apenas ocho meses de duración y conocido como “el reinado relámpago”, no tuvo apenas contenido político, una vez que el nuevo Rey, un adolescente, estaba totalmente sometido a las órdenes de sus padres, en especial a las de su madrastra, quien intentaba, de hecho con éxito, mover los hilos del Reino de España desde su residencia del Palacio de la Granja de San Ildefonso, al que se había trasladado junto con su esposo Felipe V 

El estado mental de la nueva reina va empeorando y finalmente, su marido manda una misiva a su padre en la que le informa que ha decidido encerrarla en su habitación, habida cuenta la gravedad de su estado. La Reina pues pasa días y semanas confinada en sus aposentos, sin apenas atenciones y en progresivo deterioro. 

 Poco después, el rey Luis I contrae la viruela y muere el 31 de agosto de 1724.

 

Los Reyes "padres" (Felipe V e Isabel de Farnesio) tras la muerte Luis I, volvieron de nuevo a Madrid



Isabel de Farnesio que estuvo siempre perfectamente informada de lo que sucedía en la Corte de Madrid, se empleó ahora a fondo en conseguir que fuera su marido, Felipe V, de nuevo otra vez el rey de España, y lo consiguió a pesar de que lo lógico hubiera sido que le sucediera su hermano Fernando, que era el segundo hijo de Felipe V (de su primer matrimonio)

Pero Fernando contaba con once años, y fue la rápida actuación de su madrastra, Isabel de Farnesio, quien lo impidió, haciendo frente a ciertos sectores de la nobleza castellana que apoyaban la sucesión  lógica al trono de Fernando



Isabel de Farnesio, convenció a todos con sus artimañas, y sobre todo consiguió convencer a su marido, Felipe V para que volviera a reinar

 

Tan solo una semana después de la muerte Luis I, su padre Felipe V, volvía a ostentar la Corona de la Monarquía de España, y Fernando en vez de rey era proclamado como el nuevo príncipe de Asturias



Felipe V asume de nuevo el trono, por ello se dice que Felipe V es el único Rey que reinó dos veces en España.

Isabel de Farnesio, decide deshacerse de la esposa de su hijastro, una vez que, por un lado, ya no tenía ningún interés estratégico mantenerla en Madrid y, por otro, se había convertido en un estorbo en Palacio, a causa de su estado mental.

Por ellola reina viuda de Luis I, es mandada de regreso a Francia, recibiendo una cuantiosa pensión desde España, y mejorando con el paso del tiempo, aun así, muere el 16 de junio de 1742 a la edad de 32 años, sin haber perdido nunca el rango de Reina de España.


El “segundo reinado” de Felipe V estuvo dominado por los repetidos episodios melancólicos, cada vez más graves y continuos

Desde el punto de vista político, este segundo" Felipe" hizo las veces de rey consorte de su mujer,  Isabel de Farnesio.

Una muestra del poder de su esposa se refleja en que los documentos y cartas de aquel periodo contienen la frase «el Rey y yo», como emblema de una singular monarquía dual en la que quien tomaba las decisiones políticas era la Reina.

Isabel de Farnesio era pues la "reina" de España y lógicamente la "reina" de su casa y familia, a los que dominaba sin contemplaciones

El rey y su esposa Isabel, se hicieron con una importante colección de arte; cada cónyuge marcaba sus cuadros con un símbolo dinástico diferenciado : la flor de lis, ella, y la Cruz de Borgoña , el rey 
La reina se aficionó especialmente a los cuadros de Murillo que compró en gran número

Tal fue su obsesión por el poder que obligó a Fernando, príncipe de Asturias a contraer matrimonio con una princesa portuguesa

 

La boda de Fernando, príncipe de Asturias, se celebró en enero de 1728, y la elegida fue Bárbara de Braganza



Hija de Juan V de Portugal y Mª Ana de Austria 


 


Barbara de Braganza era una mujer culta, de agradable carácter, dominadora de seis idiomas y gran amante de la música desde niña.

Fernando y Bárbara se enamoraron profundamente 

Vivieron aislados de la Corte durante el reinado de Felipe V por voluntad de la madrastra del príncipe, la reina Isabel de Farnesio, que les obligo a no mantener contactos con la nobleza castellana, y con las visitas restringidas, las cuales tenían que ser previamente comunicadas a la reina Isabel de Farnesio

No podían recibir a otros embajadores que los de Francia y Portugal, no debían comer en público, y para salir de paseo debían hacerlo acompañados de la persona asignada por Isabel de Farnesio para tal cometido y que como es lógico era de su total “confianza”.


Mientras tanto la enfermedad mental en estos últimos años del rey de Felipe V, y el deterioro físico se fueron acentuando por lo que se recluyó en el palacio de El Pardo, donde vivía de forma huraña:

No se cambiaba de ropa interior hasta que quedaba hecha jirones. No se dejaba cortar por nadie el cabello ni las uñas porque pensaba que sus males aumentarían. Así, las uñas de los pies le crecieron tanto que llegó un momento que ya no podía casi ni andar.

Creía que no tenía brazos ni piernas y  llegó hasta el punto de creer que era una rana...

Se había empeñado en llevar siempre una camisa usada antes por la Reina, porque temía que le envenenasen a través de dicha prenda… otras veces prescindía de ella y andaba desnudo ante extraños

Se pasaba días enteros en cama lleno de suciedad, pues no se levantaba ni para defecar.

Hacía muecas y se mordía a sí mismo

Cantaba y gritaba desaforadamente, y alguna vez pegó a la Reina, con la cual se peleaba a voces y repitió tanto sus intentos de escaparse que fue preciso poner guardias en su puerta para evitarlo

 Finalmente, Felipe V, llamado «el Animoso» por la oscilación de su humor, falleció en 1746 con la corona todavía en su cabeza y sumido en un estado grave de locura.



A la muerte del rey Felipe V, subió al trono de España , el príncipe de Asturias, 2º hijo varón de su primer matrimonio con María Luisa Gabriela de Saboya:

 

Fernando VI 



En 1746 Fernando sube al trono de España y su esposa Barbara de Braganza, pasa a ocupar un importante papel en la corte, especialmente como mediadora entre el rey de Portugal y su esposo. 


Apenas transcurrida una semana de la muerte de su padre, el nuevo rey Fernando VI ordenó a su madrastra, la reina viuda Isabel de Farnesio, que abandonara el palacio real del Buen Retiro acompañada de sus hijos, los infantes Luis y María Victoria.

Al año siguiente fue desterrada de Madrid y su residencia quedó fijada en el palacio de La Granja de Segovia, como castigo a los desprecios que había aplicado esta, desde su posición de poder, a los consejeros de la reina María-Luisa Gabriela de Saboya, su madre. Y por supuesto a todo lo que le había hecho tanto a el como a su hermano, el fallecido rey Luis I de España

 

 Los reyes Fernando VI y Barbara de Braganza estuvieron muy unidos, hasta que, en la primavera de 1758, ella fue trasladada a Aranjuez pensando que allí se restablecería, ya que padecía una tos continua, pero fallece el 27 de agosto



Bárbara de Braganza es recordada como una reina moderada en sus costumbres, mecenas y amante de las artes, así como por el sincero amor y fidelidad que profesó a su marido el rey, y él a ella, cosa no tan frecuente en tiempos de matrimonios políticos o de conveniencia.

El mismo día en que murió doña Bárbara, el rey Fernando VI abandono Aranjuez para instalarse en el castillo de Villaviciosa de Odón

Durante un año, justo desde el fallecimiento de la reina, España estuvo prácticamente "sin rey", pues se produjo un agravamiento en su salud, hasta llegar a un alto grado de locura:

El rey Fernando VI dejo de hablar, fue reduciendo sus comidas hasta el punto de no alimentarse, sus temores a morir ahogado fueron aumentando y se encerró en una habitación muy pequeña donde pasó sus últimos meses

 

En esos años de destierro, Isabel de Farnesio vivió dedicada a sus tareas privadas, pero siempre atenta tanto a la evolución del reinado de su hijastro como a su salud, muy especialmente tras la muerte de su esposa Barbara de Braganza
De todo ello le daba cuenta su hijo Luis, hermanastro del rey Fernando que escribía  a su madre Isabel de Farnesio contándole con todo tipo de detalles, el “deterioro” de su hijastro: el Rey FernandoVI

  “Se muestra agresivo, tiene unos impulsos muy grandes de morder a todo el mundo y para calmarlo le suministraban opio. Intentó suicidarse en varias ocasiones y pidió veneno a los médicos o armas de fuego a los miembros de la guardia real. Juega a fingir que estaba muerto o, envuelto en una sábana, diciendo que es un fantasma. Cada día estaba más delgado y pálido, lo que se une a la dejadez en su aseo personal. No duerme en la cama sino sobre dos sillas y un taburete…”

 Fernando VI murió el 10 de agosto de 1759




Al no haber tenido descendencia, subió al trono de España su hermanastro, hijo de Felipe V y su segunda esposa Isabel de Farnesio


CARLOS III



Fue entonces cuando Isabel de Farnesio volvió a la corte, pero las continuas peleas y discusiones con su nuera, Maria Amalia de Sajonia, la hicieron volver a su exilio hasta el fin de sus días en la localidad madrileña de Aranjuez









No hay comentarios:

Publicar un comentario